«Bristol Aeroplane Company» tal como su nombre lo indica fue una compañía inglesa dedicada a la fabricación de aviones y sus insumos a partir de 1910.
Sus productos tuvieron gran éxito entre las dos grandes guerras y es allí que a la finalizacion de la Segunda Guerra Mundial, decide entrar al mundo de la fabricación de automóviles de lujo.
Tras la victoria aliada, Bristol se queda con los diseños e ingeniería de BMW en compensación por los daños bélicos que sufriera su industria. Es así como su primer modelo, el Bristol 400 es una derivación de partes y tecnología de los BMW 326/327/328 de la firma Bavara.
El tipo 400, introducido en 1947, utilizó la mecánica de 6 cilindros y 2.000 cm3 del BMW 328.
Esta configuración se dio hasta mediados de 1961 en el cual todos los modelos de la firma utilizaban esa planta propulsora y sus posteriores desarrollos.
En 1961 con la aparición del modelo Bristol 407 se comenzaron a utilizar en los vehículos motores Chrysler V8 de 5.130 cm3 y equipados con cajas automáticas, dejando de lado así lo que alguna vez hubiera sido un trofeo de guerra, como lo fue el 6 cilindros en linea del BMW 328.
El cambio de motorización se debió a la necesidad de agiornarse a los nuevos tiempos y contar con vehículos mas potentes para no perder su lugar en el segmento de los autos deportivos.
Tal vez uno de los ejemplos mas claros del carácter que le quería impregnar la marca fue la aparición del Bristol 411 en 1970 con motor V8 de 6.277 cm3 y logrando de esta forma impulsar al vehículo a una velocidad máxima de 220 Kms/h.
La fabricación de los sucesivos modelos se extiende hasta nuestros días y esta marca es la única que actualmente se conserva en manos de capitales Británicos, tal como fue en sus inicios .