Sugestivo titulo para un film estrenado en 1995 y que contó con la participación estelar de Keanu Reeves, Aitana Sanchez-Gijon y un ya envejecido Anthony Quinn.
Seguramente el nombre, un paseo por las nubes, hace referencia exclusivamente al paradisíaco viñedo enclavado en la altura de un México de la primera mitad del Siglo XX que prestó marco para la encantadora visual de la película y no a la aparición repentina, y debería decir también muy escasa, de un vehículo que bien podría haber sido usado como el instrumento para tal fin.
Hablamos de un Cord 812 Cabriolet de 1937 (color bordo en el caso del film) con tracción delantera, caja de cambios semi-automatica con comandos eléctricos e impulsado por un motor Lyncoming V8 de 4.300 cm3 y 125HP . El valor histórico de tal belleza reside también en que fue el ultimo de su estirpe, ya que ese año el conglomerado Auburn-Cord-Duesenberg cerraba sus puertas definitivamente.
A WALK IN THE CLOUDS
Suggestive title for a film released in 1995, starring Keanu Reeves, Aitana Sanchez -Gijon and an aged Anthony Quinn.
Surely the name, A Walk in the Clouds , refers exclusively to the vineyard paradise nestled in the height of a Mexico in the first half of the twentieth century that served as framework for the lovely visual of the film and not because the sudden appearance of a vehicle that could have been used as the instrument for this purpose.
We talked about a 1937 Cord 812 Cabriolet (burgundy in the case of film) with front- wheel drive, semi -automatic gearbox with electric commands and powered by a V8 engine Lyncoming 4,300 cm3 and 125HP . The historical value of such beauty also is that it was the last of its production line, since that year the conglomerate Auburn- Cord- Duesenberg closed its doors.